5 Consejos para elegir un Vestido de Noche

¿Te ha pasado que cuando te invitan al evento social por la noche de alguien muy cercano o especial para ti pronto te pones a buscar opciones sobre el vestido que usaras? ¡Yo creo que sí!

Para todas las mujeres convertirnos en la invitada perfecta es nuestro objetivo principal. Es por ello, que podemos recorrer varias tiendas y pasar horas para encontrar el vestido que nos hará lucir elegantes y hermosas.

A veces esta tarea no resulta nada fácil, porque dentro de las miles de opciones hay algunos vestidos que nos pueden convenir más que otros o que el color te guste pero no el modelo o que simplemente se salga de tu presupuesto. ¡Una difícil decisión!

El vestido de noche debe ser elegante en tejidos y colores más sobrios, pero acorde con tu imagen diaria para que no parezca que vas disfrazada y, sobre todo, has de ir cómoda para poder moverte con soltura y elegancia. Por eso, aunque sea un vestido difícil de llevar, si te sientes guapa, elegante y cómoda con él, será el adecuado.

Así que, si tienes un evento importante y estás en búsqueda de vestidos de noche, juveniles y glamourosos que se adapten a tu personalidad, no dejes de revisar los consejos que hemos seleccionado para ti.

1. El color de piel

Debes tomar en cuenta un factor importante a la hora de escoger tú vestido de noche: el color que mejor favorezca el tono de tu piel. Todas somos diferentes, y no por ello menos hermosas que otras. Tener en cuenta tanto el color de tu piel como el de tu cabello puede ayudar a que elijas aquellas tonalidades de vestidos que más te favorezcan.

Generalmente las chicas con tez blanca, lucen mejor los vestidos de noche en colores con tonalidades de azul marino, azul cielo, negro, gris oscuro, rojo cereza, morados, rosados. ¡Te favorecerán en sobre manera! El blanco y los colores claros o pastel no te sentarán nada bien. Mejor opta por tonos fuertes y vivos.

Mientras que las mujeres con un espectacular color oscuro, lucen muy atractivas con colores brillantes como las tonalidades rojas, amarillos, naranjas, rosas, violetas, verdes, granates, nude, azul oscuro, turquesa, los metalizados, etc. ¡Olvídate de los marrones!

2. Tipo de cuerpo

Ya que sabes cuáles son las tonalidades que mejor nos favorecen, ahora nos tenemos que dar a la tarea de conocer las zonas y características que queremos potenciar y otras que preferimos disimular, en el afán por sentirnos cómodas con un determinado diseño y convertirnos en las invitadas perfectas.

Algunos puntos que tienes que tomar en cuenta al momento de elegir el modelo que mejor favorezca tu silueta son los siguientes:

El corte

El corte que elijas para tu vestido debe hacerte sentirte cómoda, es por ello, que antes de escoger tu vestido de noche, pruébatelo, camina con él, llévalo con los accesorios que piensas usar y asegúrate de que el corte le favorece a tu cuerpo.

Te aconsejo que cuando vayas en busca de tu vestido de noche tengas ya una idea clara de lo que te gustaría para esa ocasión especial y así tardarte menos tiempo.

Escote

En cuanto al escote, si tienes mucho busto los más apropiados son los de forma cuadrada como el halter (unido por un tirante detrás del cuello), o uno con mangas cortas o tirantes anchos. Si tienes poco pecho, lo ideal es un modelo en palabra de honor o un escote pronunciado en forma de pico. También puedes elegir un vestido cerrado.

Mangas

Si tienes los brazos gruesos o no son tu punto fuerte opta por vestidos con manga francesa o tres cuartos, ¡son los que más estilizan!

Largo

Si eres una chica alta puedes elegir cualquier largura, pero si eres de pequeña estatura, evita los vestidos muy largos pues te harán parecer aún más bajita.

3. El lugar

Escoger un vestido de noche es una tarea en la que se deben considerar varios aspectos claves, y uno de los más destacables, es el lugar y contexto donde se realizará la celebración para descartar opciones en encuentres en tu búsqueda. Es evidente entender que no es lo mismo una boda de gala en un salón de fiestas que en una playa.

Por ejemplo, si es una boda en la playa, elige un estilo más bohemio confeccionado en tejidos fluidos que no te asfixien; en caso de ser en un jardín, tal vez no quieras ir arrastrando tu vestido y si es en territorio lluvioso, lo más probable es que no te apetezca que tu vestido toque el suelo. Medita previamente tu elección.

Generalmente los vestidos de salón son modelos de faldas largas y llegan hasta los tobillos. Recuerda que para toda ocasión hay una opción apropiada para ti. Lo importante es asegurarte de que estarás cómoda para la ocasión y puedas disfrutar de tu velada.

4. Tipo de evento

Éste es un parámetro fundamental que has de tener en cuenta siempre que estés buscando un estilismo perfecto para un acto de día o para una fiesta de noche. Muchas veces se nos olvida el tipo de evento al que acudiremos y pecamos por exceso o por defecto. No es lo mismo acudir a una boda de tarde, a una cita nocturna relacionada con nuestra empresa o a una graduación en las que somos la homenajeada o la invitada.

Las bodas, por ejemplo, requieren especial atención al color, pues el blanco es exclusivo de la novia y nosotras tenemos que decantarnos por colores que no permitan tal confusión. Para las graduaciones todo depende de si eres tú la graduada, en cuyo caso recomendamos un vestido largo y darle rienda suelta a tu estilo propio, pero si eres invitada, para este caso te recomendamos vestidos de noche más casuales. En cuestiones laborales un vestido negro y sobrio siempre es un acierto.

5. La tela

Este aspecto tiene mucho que ver con el clima bajo el cual se celebrará la fiesta. Si tu evento es una boda en la playa, procura escoger un vestido de noche con telas vaporosas que le permitan a tu piel respirar y sentirse más libre, así podrás bailar sin problema sin dejar de sentirte fresca. Si por el contrario es un evento en la ciudad, considera las posibilidades de escoger un vestido de noche más abrigador que no te haga pasar frío y verte elegante.

Del mismo modo, un modelo excesivamente ligero y vaporoso para una cita fría en el exterior, puede ser otro gran problema.

Además, a la hora de elegir la textura y las características del tejido de tu vestido, recuerda que debes combinarlos con el resto de los complementos: un vestido cargado de apliques y bordados debe ir de la mano de accesorios más discretos y minimalistas. Mientras que los modelos más sobrios o monocolor, requieren de detalles que le den vida al look. La idea es mantener el equilibrio.

Como verás son varios los puntos que debes toma en cuenta para escoger un vestido de noche. Tal vez parezca una tarea una tarea fácil, pero no lo es, así que ármate de paciencia para recorrer más de una tienda, probarte muchos modelos y darte cuenta de que el vestido que te guste no estará en el color o la talla que deseas, será demasiado caro o habrá algún detalle que no te plazca del todo. ¡Todo esto hazlo con anticipación y dedicación! Te aseguro que lograrás encontrar el vestido ideal que te hará lucir perfecta con el peinado, maquillaje y accesorios que elijas.

Me gustaría que tengas bien claro que un vestido de noche no debe ser forzosamente largo, eso no es una imposición. Recuerda que lo importante es que te sientas cómoda con lo que llevas usando y que te favorezca. Si los vestidos largos no te laten tanto existen infinidad de vestidos de noche midi con un corte adecuado para ti.

Y ya para terminar, quiero recordarte que no te dejes llevar por cómo modelan las chicas de las fotografías los vestidos que veas pues puede ser que ese o esos modelos no nos sientan bien o no nos favorecen. Conocer nuestro cuerpo es fundamental, así como sentirnos cómodas dentro de un determinado diseño y tener total libertad de movimientos y no ir ajustada. Por eso, es fundamental armarse de paciencia y probar hasta hallar el modelo que te haga sentir cómoda y deslumbrante.

¡Ya estás lista para comenzar la búsqueda!